Esta historia la pueden averiguar y comprobar la veracidad de la misma. La leí en un artículo de prensa y la cuento de memoria.
Cuando la guerra de Sarajevo, los sentimientos antinorteamericanos alcanzaron su máxima expresión. Como ustedes sabrán, McDonald’s además de ser una venta de comida rápida es quizá uno de los símbolos más importantes que representan a los EEUU.
Por supuesto no quedó un local de McDonald’s en pie. La rabia antinorteamericana se depositó en los locales y fueron destruidos a palos y piedras.
El Gerente General de McDonald’s de Sarajevo se encontró con ese desolador panorama. Un país en guerra, todos sus locales destruidos y una población que veía en McDonald’s como el símbolo más representativo de su enemigo.
¿Qué hizo este gerente?
Estando en plena guerra reparó los daños en los locales. Estos mismos locales los prestó como refugios. Empezó a repartir hamburguesas gratis en hospitales, refugios y colas para recibir alimentos, y por último hizo una hamburguesa con una carne típica de la zona y al símbolo de McDonald’s le colocó la boina tradicional de los servios.
El fin del cuento es que frente al panorama más desolador imaginable, este empresario en vez de pegarse un tiro o irse a los EEUU y abandonar la pelea, logró interpretar su realidad, tener una planificación acorde a ese análisis y logró reactivar con éxito los McDonald’s de Sarajevo.
Señores de McDonald’s, volvamos a Venezuela.
Tanto en Sarajevo como en Venezuela, como en la mayor parte del Mundo McDonald’s simboliza a los EEUU.
Estamos viviendo un paro, que más allá de las consideraciones de si es legítimo o no, hay mucha gente que piensa que se trata de un paro golpista. (Me encuentro entre los que piensan así)
Más allá de que sea cierto o no, hay mucha gente que piensa que en la planificación del golpe de estado del 11 de Abril y en el impulso de este paro, las manos de los EEUU están metidas.
Suponiendo, como creo que va a pasar, de que el paro no conduzca a la caída del Gobierno de Hugo Chávez, mucha gente dejará de consumir como castigo a la participación de ustedes en este paro. De hecho, en lo particular ya les he ido explicando a mis hijos que dejaremos de ir a McDonald’s como ocasionalmente lo hacíamos.
Partiendo del supuesto negado (Y Dios no lo quiera) de que el golpe de Estado se consume, es posible que mucha gente salga a la calle a protestar, y es posible que ya no en forma pacífica como se hizo el 11 de Abril.
Es posible que después de eso no quede ni un MacDonald’s en pie como en Sarajevo, y esto no es ninguna amenaza, porque yo no soy quien para amenazar a nadie, ni participaría en nada parecido ni estaría de acuerdo con algo así.
Señores de MacDonald´s, creo que aún están a tiempo de reflexionar y cambiar su actitud frente a este paro. Después de todo pienso que el interés de Ustedes no está en que se privatice PDVSA, ni en que Primero Justicia llegue al poder, ni en que el Alcalde Peña no pague por sus delitos. Creo yo, que el interés de ustedes es vender hamburguesas. Así de simple. ¿O no?
(escrito en Diciembre de 2002, a propósito que McDonald's se plegó al paro petrolero que tenía las intenciones de derrocar al Gobierno legítimo de Hugo Chávez)
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